Del rojo al púrpura.

game of thrones Juego de Tronos.

Geroge Raymond Richard Martin se lo tiene que estar pasando realmente en grande. Y los espectadores de Juego de Tronos –y también sus lectores- no ganan para sustos. Entre el final de la tercera temporada y el inicio de la cuarta se han producido algunos de los momentos más intensos de la serie. En Desembarco del Rey y Los Gemelos. Con los Stark y los Lannister. Dos celebraciones que acaban en tragedia. De la boda roja a la boda púrpura.

Evidentemente, este artículo contiene spoilers.

El autor de la saga Canción de Hielo y Fuego ha confesado en múltiples ocasiones que sus seguidores no deben esperar un final feliz y que deben estar preparados para la muerte de cualquiera de los personajes principales. Así se ha ido confirmando desde la primera temporada, en la que ya desaparecieron casi la mitad de los personajes importantes que aparecieron en los primeros episodios. En la segunda bajó un poco la intensidad de las muertes de protagonistas pero en la tercera tiene un repunte al final que nos dejó helados. La cuarta comienza fuerte y será más sangrienta todavía.

«Tu lees ese tipo de ficción donde los buenos ganan y eso te reafirma que la vida es justa. Así no es la serie de Hielo y Fuego. Porque intenta ser más realista sobre como es la vida. Tiene felicidad, pero también tiene dolor y miedo. Yo creo que la mejor ficción captura la luz y la oscuridad de la vida». George R. R. Martin

Martin ha pasado por la guillotina a personajes que, a priori, parecían demasiado carismáticos como para que sus libros aguantaran sin ellos. No pasaba nada si perdíamos a Viserys, e incluso podíamos sobrevivir sin Robert Baratheon, pero parecía imposible hacerlo sin Ned Stark. Su ejecución no fue más que la confirmación de que todos los personajes andan sobre el filo de la navaja.

game of thrones roose bolton

«Los Lannister os mandan recuerdos» le dice Roose Bolton a Robb justo antes de acabar con su vida.

Y Martin consiguió lo que quería, aportar más realismo al conjunto de su historia. El autor declara que la vida en raras ocasiones es justa y que así intenta plasmarlo en su obra. Y es así como llegó a uno de sus capítulos más crueles: la boda roja. Todo seguidor de la serie sufrió un pequeño infartito al ver que Frey había planeado la venganza contra Robb Stark y con la ayuda de Bolton logra hacer trizas a su ejército norteño y acaba con la vida del joven lobo, de su prometida y de Catelyn en uno de esos momentos televisivos que hielan la sangre. Michele Fairley está soberbia y desgarradora en esta escena.

La temporada acaba con la sensación de que los Stark, que es la familia por la que el espectador medio siente más afecto, están realmente jodidos. Pero si la tercera entrega de la serie ha traído la tormenta sobre la casa Stark, en la cuarta los vientos soplarán ferozmente sobre Desembarco del Rey -cabe recordar que la tercera y cuarta temporadas corresponden únicamente al tercer volumen de la saga literaria-.

Game of thrones red wedding

Margaery y Joffrey en pleno regocijo púrpura.

Y así se ha confirmado en la boda púrpura que unía a la joven Margaery Tyrell con el insoportable Joffrey. Tras humillar a su tío, el despótico e imberbe rey no tiene tiempo de disfrutar de la gloria de ese día y cae envenenado mientras su madre acusa a Tyrion y los asistentes quedan horrorizados. Momento impactante, aunque esta muerte no nos deja destrozados como las de Robb y Catelyn.

Martin participa como asesor y también como guionista en la serie. Él ha guionizado un episodio por temporada y… ¿Adivináis cuál ha escrito en la cuarta? Se nota que el autor se ha deleitado con el episodio segundo titulado El león y la rosa, una boda larga en la que quiere dejar patente –quizás en exceso- la hostia que todos le daríamos a Joffrey mediante su desprecio a casi todo el que está alrededor, el ninguneo a Sansa y especialmente la humillación que le brinda a Tyrion.

El efímero rey Lannister es sólo un nombre más que añadir a la larga lista de muertes importantes que hemos sufrido en la serie y con la que el autor de la saga disfruta al observar como el espectador y el lector quedan estupefactos: Ned, Robert, Viserys, Khal Drogo, Renly, Catelyn, Robb… Y las que quedan. Él bromea diciendo “cada vez que alguien me pregunta cuánto queda para el próximo libro, mato a un Stark”.

Lo dicho: George R.R. Martin debe estar disfrutando como un enano. El verdadero matarreyes no es Jaime, es él.

game of thrones george rr martin

Martin muy bien flanqueado por Rose Leslie -Ygritte, izq.- y Emilia Clarke -Daenerys-.

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